15 enero 2006

LA POLÍTICA SEXUAL, "DE MODA" EN ITALIA



Mientras decenas de miles de mujeres se manifestaban en Milán en defensa de una antigua ley sobre el aborto, cientos de homosexuales salían a la calle en Roma para pedir el reconocimiento legal de las parejas que no están casadas.

La de este sábado fue en efecto una jornada repleta de "política sexual": según el corresponsal de la BBC en Roma, David Willey, éstos serán los temas clave de la campaña electoral que se avecina de cara a las elecciones generales del próximo mes de abril.

Las protestas tienen lugar tan sólo dos días después de que el Papa Benedicto XVI condenara públicamente el aborto y el matrimonio entre homosexuales.

Tanto el Vaticano como los ministros del conservador premier italiano, Silvio Berlusconi, criticaron las manifestaciones.

"Estos manifestantes son verdaderamente nauseabundos", dijo el ministro de Reforma, Roberto Calderoli, según informa la agencia italiana de noticias ANSA.

"La familia es algo serio, basado en el amor entre un hombre y una mujer", declaró.

A su vez, el ministro de Cultura, Rocco Buttiglione, comentó ante la prensa que la gente debería emplear sus energías a favor de la familia, "porque sin niños, Italia se muere", dijo.

Por su parte, el Vaticano calificó la protesta de Roma como una provocación.

Los manifestantes de Milán, la mayoría mujeres, expresaban su temor a que los políticos católicos (con el apoyo del Vaticano) traten de cambiar una ley del aborto, aprobada hace 27 años, que permite la terminación del embarazo durante los primeros tres meses de gestación.

Según la policía y los organizadores, unas 50.000 personas participaron en la manifestación, bajo el lema "salgamos del silencio".

Entretanto en Roma...

Justo en frente del Vaticano, al otro lado del río Tíber, una protesta más pequeña que la de Milán pero casi igual de sonora, llenaba la encantadora Piazza Farnese.

El objetivo de los allí congregados (alrededor del millar según la policía), era reclamar el reconocimiento legal de los derechos de las parejas que no están casadas, tanto las heterosexuales como las homosexuales.

La influencia del catolicismo era una fuente de resentimiento entre algunos de los manifestantes. "Liberemos al amor de la fobia religiosa", se leía en una de las grandes pancartas.

El matrimonio entre homosexuales y el reconocimiento de los derechos de las parejas no casadas (de cualquier sexo) es el tema polémico del momento en Italia.

La oposición italiana (de izquierda) ya anunció que cambiaría la ley si gana las elecciones generales del próximo abril, con el fin de dar un reconocimiento legal a la unión de las parejas heterosexuales que no están casadas.

En cuanto a las parejas homosexuales, la propia oposición se encuentra dividida: hay quienes consideran que Italia debería seguir el mismo camino que emprendió hace tan solo unos meses España, un país también con fuerte tradición católica, que decidió legalizar el matrimonio entre las personas del mismo sexo.

Pero otros líderes de la oposición no lo tienen tan claro. Entre ellos está Romano Prodi, aspirante a primer ministro en los comicios que se avecinan.

Según el corresponsal de la BBC, Prodi se encuentra en un difícil dilema, ya que tanto él como su esposa son católicos practicantes y están bajo presión para mantener los tradicionales valores familiares del catolicismo.

Información extraida de: BBC Mundo

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