05 septiembre 2006

UN PASEO POR EL ARTE CON GEHITU



Están organizadas por Gehitu, la Asociación de Gays, Lesbianas y Transexuales del País Vasco, pero que nadie se confunda. Las visitas guiadas que se llevan a cabo por las diferentes expresiones artísticas que inundan la capital guipuzcoana son una invitación abierta a todos los donostiarras, homosexuales y heterosexuales dispuestos a disfrutar de las creaciones más variopintas por espacio de dos horas.

Esa es la duración del itinerario que les lleva a contemplar museos, esculturas erigidas en la vía pública, muestras montadas en bares e incluso escaparates. Cualquier obra puede dar lugar a una escala que promete infinitas interpretaciones dentro de ese recorrido trazado por Joaquín Garrido, un apasionado confeso del arte que disfruta ejerciendo de cicerone.

«Pasarlo bien»

«Me gusta mucho ir a ver exposiciones y cuando voy con amigos les explico lo que vemos, hablamos de lo que nos sugieren », comenta el propio Joaquín. «Me di cuenta de que era algo interesante y empezamos a quedar para poner en marcha salidas de una forma totalmente informal, sólo para pasarlo bien».

De eso hace ya tres meses y su idea va camino de consolidarse. Así lo prueba la más de una decena de personas que participa cada vez que se celebra la actividad. «Una semana el lunes y la siguiente, el miércoles». La sede de Gehitu, una oficina situada en la tercera planta de la calle Arrasate, 51, les sirve de punto de encuentro y también de partida de su paseo por el lado más artístico de San Sebastián.

Hoy Joaquín propone a sus compañeros de travesía visitar dos salas «muy diferentes», con el fin de descubrir «la importancia que juega el comisario de exposición». La primera de ellas es la denominada Kubo-Kutxaespacio del Arte, donde les espera "El cincel y la palabra".

«Ahí encontramos el primer fallo, en el título, porque en ninguna de las obras que podemos ver aquí se ha utilizado el cincel», dice Joaquín al grupo que sigue con auténtico interés sus explicaciones y los comentarios que realiza ante los trabajos de Manolo Valdés - «un impresionista de la escultura»-, los del «maestro» Chillida y los firmados por Koldobika Jáuregui, «un autor con el que dan ganas de casarse».

Más crítico se muestra cuando se trata de abordar la disposición de las distintas creaciones. «Las han colocado de tal forma que es imposible ver todas sus caras, rodearlas». O su combinación. «Me parece un error mezclar cosas de artistas tan destacados como Oteiza o Mascaró con las esculturas de alumnos de un taller de cerámica», asegura.

Y las críticas se convierten en alabanzas ante un Tàpies en forma de libro abierto, en cuyas páginas se clavan cucharas, cuchillos y tenedores. Su visión provoca de inmediato multitud de opiniones contradictorias. «Es una ensalada de saber», indica Joaquín. «La composición es bonita, pero no me gusta la parte de metal. Me recuerda a mis peores pesadillas. Parece un libro de cocina», confiesa Itziar, una de las participantes en la visita guiada. «Es una metáfora, una invitación a devorar la cultura», añade por su parte Blas, otro de los asistentes.

Pintura y canción

La otra sala incluida en la ruta que Gehitu propone en esta ocasión por la ciudad es la existente en el Centro Cultural Okendo. En ella se encuentra actualmente la exposición "Volad, canciones, volad", organizada con motivo del cincuentenario de la canción de autor.

«Su título es un poema de Alberti y el comisario, Fernando González Lucini, ha llevado a cabo un trabajo muy acertado, mostrando las portadas de discos y los originales en los que éstas se inspiran», reconoce Joaquín ante el Miró que encerraba un vinilo con la voz de María del Mar Bonet o el cuadro de Saura con el que se vendieron los temas musicales interpretados por José Antonio Labordeta en Cantata para un país.

«Estamos viendo continuamente obras buenas», subraya el precursor de estos paseos por el arte, mientras el grupo al completo contempla las diferentes piezas, a las que se suman caricaturas y discos, como los de Amancio Prada, Imanol o Paco Ibáñez, prohibidos décadas atrás en España.

«Cualquier creación de éstas es fantástica», sostiene Joaquín antes de dar por concluido el recorrido y recordar a los demás aficionados al arte la próxima cita que les aguarda en su agenda: «Será mañana, 6 de septiembre, a las 18.30 horas, en la sede social de Gehitu».

No hay comentarios: